Tipos de Citas
1. Citas directas: Se reproduce textualmente una obra de otro autor, o una obra del mismo autor publicada previamente. El elemento que se deben incluir es el número correspondiente de la fuente.
- Citas cortas: Cuando la cita tenga menos de 5 renglones, se le debe incorporar en la misma oración, colocándola entre comillas " ".
- Citas largas: Cuando la cita tiene de 5 renglones o más, se le debe incorporar en una nueva línea con una sangría al margen izquierdo, sin disminuir ni aumentar el interlineado, y sin entrecomillar el texto citado.
2. Citas de paráfrasis: Explica las ideas de otro autor sin citarlo textualmente, es decir, con sus propias palabras. El elemento que se debe incluir es el número correspondiente de la fuente.
Consideraciones
Las siguientes consideraciones se aplican al cuerpo de la investigación (no al listado de referencias bibliográficas):
- De acuerdo al orden en el que se colocan las citas, se designa un número al autor citado y el número designado será en orden correlativo.
- Al citar a un autor más de una vez en un mismo texto; la cita conserva el mismo número empleado en la primera cita.
- Si el autor no se menciona en la cita, el número que le corresponde al autor será colocado al final de la cita.
Ejemplo: Las infecciones de tipo bacterianas ocasionan alteraciones a nivel de la mucosa estomacal (1).
- Cuando el texto a citar tiene más de un autor se citará el primer autor y se adicionará la locución et al.
Ejemplo: Bartolomé et al. (5) al comprobar que el principio activo...
- Cuando la cita corresponde a un autor corporativo, se emplea el nombre de la institución como si se tratara de un autor personal
Ejemplo: El Instituto de Enfermedades Neoplásicas (8) actualmente determinó que la proliferación de ciertos tejidos puede ser una señal de...
- En el caso de los libros escritos por varios autores, al citarse un capítulo en específico, se coloca en la cita al autor del capítulo empleado.
- Si hay más de una cita en un párrafo, estas deben ir separadas mediante comas (,)
Ejemplo: Ingestion of toxic amounts of vitamin A has long been known to have adverse skeletal effects (1,2).